El Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA) y el Gobierno Autónomo Municipal de Quirusillas (provincia Florida de Santa Cruz) dieron por concluido el proyecto Manejo Integral de la Cuenca Quirusillas, que beneficiará a familias de siete localidades de este municipio de los valles cruceños.
Con una inversión total de Bs 3.944.346, de los cuales el 80% fue financiado por el MMAyA (BS 3.155.476), este proyecto cuenta con varios componentes y su misión principal es apoyar a los productores y vecinos de la región para mejorar su aprovechamiento de los recursos hídricos del lugar, mientras se generan actividades productivas amigables con el medio ambiente y se evitan los impactos del cambio climático en esta zona, informó la ministra de Medio Ambiente y Agua, María Elva Pinckert, quien participó de los actos realizados en este municipio.
Las 151 familias beneficiaras son de las comunidades de Hierba Buena Civil, San Juan de Florida, San Luis, Río Abajo, Filadelfia, Rodeo y Rasete, pero el impacto de la planificación alcanza también a toda la población general del municipio de Quirusillas (2.995 habitantes) e indirectamente a otras 1.553 familias de los municipios de Samaipata y Mairana.
Los pequeños productores fueron capacitados en técnicas de reforestación, apicultura, fruticultura, manejo de forraje, manejo de ganado, producción de fertilizantes y además se implementó 47 sistemas de riego (por aspersión y goteo) y la construcción de 26 atajados con geomembrana y 24 atajados de tierra, para la “cosecha” de agua para su aprovechamiento.
Mención aparte merece la reforestación que se hizo en el lugar, específicamente en la ribera del río Quirusillas, que fue protegida con dos kilómetros lineales de plantaciones de sauce y caña, pero que se complementó con la limpieza del cauce de este río, además de otro cerco de protección en tres bocatomas de captación de agua para consumo humano, para evitar su contaminación.
Con este tipo de proyectos integrales, los pequeños productores agropecuarios del país verán una mejora en el rendimiento de sus cultivos y de sus hatos ganaderos, a la vez que aprenden a cuidar del agua y del medio ambiente mediante el manejo sostenible y científico de sus recursos naturales, con lo cual se evitarán los devastadores efectos del cambio climático, concluyó la ministra Pinckert.