Santa Cruz, 3 de agosto de 2020 (ABI). – La presidenta Jeanine Áñez afirmó este lunes que no hay economía posible en el capitalismo ni el socialismo sin el «cuidado milimétrico» del medio ambiente.
«No hay economía posible sin cuidado del medio ambiente, no hay economía posible ni en el capitalismo ni en el socialismo, sin un cuidado milimétrico de los sistemas ecológicos», afirmó Áñez, durante la presentación de un plan de recuperación de zonas afectadas por incendios en Santa Cruz.
Agregó que la razón para que dar énfasis al cuidado del medio ambiente es porque la economía de cualquier país está fundamentada en la sostenibilidad de la vida.
Es decir que «todo sistema de vida en cualquier Estado, más allá de las ideologías políticas, está fundamentado en una convivencia equilibrada entre la sociedad y el medio ambiente», enfatizó.
En ese contexto, remarcó que cuando en Bolivia se habla de la reactivación económica, de la generación de nuevos empleos y el reimpulso del ingreso de las familias, en el fondo se está afirmando «que vamos a impulsar una economía para la vida y eso significa una economía en armonía con el medio ambiente».
Por tanto, «que esta pandemia tan dura que estamos viviendo sirva para reflexionar sobre la vida, sobre el medio ambiente y sobre la íntima armonía que debe existir entre el ser humano y la naturaleza», manifestó.
Asimismo, rindió homenaje a la generación de jóvenes que el año pasado, preocupados por el incendio en la Chiquitania, cuestionó duramente al gobierno del expresidente Evo Morales por aprobar normativas de autorización de quemas y desmontes.
«Mi homenaje va a esa generación que entendió el nexo entre la democracia y medio ambiente. (Por eso ahora) estamos trabajando en diferentes frentes para cuidar el bosque, en particular el bosque chiquitano, y el Gobierno ha demandado de inconstitucional la ley que permite los chaqueos, esa ley que fue impulsada por el anterior régimen», señaló.
En ese sentido, dio a conocer que el Gobierno ha puesto en marcha un plan de prevención en la Chiquitania, que no tiene precedentes y que no se activa en los meses de riesgo, sino con mucha anticipación, por ejemplo, con la formación de bomberos profesionales y una cultura ciudadana para cuidar el bosque.
Puntualizó que este plan fue elaborado con la participación de las Fuerzas Armadas, la Policía Boliviana, autoridades locales, comunitarias y poblaciones indígenas.