El Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA) presentó este lunes la Estrategia Nacional de Tratamiento de Aguas Residuales (ENTAR), que es el marco en que se desarrollará todo el trabajo de las diferentes instituciones y organizaciones de Bolivia para mejorar la calidad del agua reduciendo la contaminación, eliminando el vertido de líquidos de deshecho y reduciendo la emisión de productos químicos y materiales peligrosos, para reducir a la mitad el porcentaje de aguas residuales sin tratar en el país.
El acto de lanzamiento de esta importante estrategia se realizó con la presencia de la titular del MMAyA, María Elva Pinckert; el viceministro de Agua Potable y Saneamiento Básico, José Antonio Ortiz; el representante en Bolivia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Alejandro Melandri; Francisco Sancho López, coordinador general de la Agencia Española de Cooperación para el Desarrollo; y Tito Armando Velasco, viceministro de Inversión Pública y Financiamiento Externo, entre muchos otros representantes de la cooperación internacional en el país.
Un informe de situación, establece que de 219 plantas de tratamiento de aguas residuales inventariadas en Bolivia, 113 no funcionan de manera adecuada, lo que significa que sólo el 30,5% de las aguas residuales de toda la población boliviana son tratadas de manera adecuada.
El impacto de la descarga de aguas residuales sin tratamiento se traduce en la contaminación de los cuerpos de aguas superficiales y subterráneas (para consumo humano, para cultivos) impactando directamente en la salud de la población.
Es en este sentido que la meta del MMAyA y del Gobierno, es llegar hasta 2030 a lograr el 65% del tratamiento de aguas residuales en todo el país, logrando una gestión sostenible y resiliente de estos líquidos, para conservar el medio ambiente con la participación de toda la ciudadanía y los tres niveles de gobierno.