La Paz, 31 may (UC – MMAyA).- El Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA) informó que realiza el monitoreo continuo de focos de calor que se registran en el territorio boliviano con el propósito de alertar a instituciones y municipios vulnerables para que puedan tomar las acciones necesarias de prevención ante posibles incendios forestales.
Los focos de calor son puntos de concentración de temperatura que se identifican mediante imagen satelital, con la posibilidad de ser un fuego activo u objetos que reflejan temperaturas (botellas, calaminas, artefactos de fierros en el campo, entre otros).
Según el MMAyA, el reporte de focos de calor se constituye en un informe oficial como parte de las medidas de prevención y control de incendios forestales; es elaborado de manera conjunta con la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT), complementado con datos meteorológicos proporcionados por el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) y entregados a los gobiernos municipales.
Entre otras acciones, el MMAyA informó que realiza campañas de prevención, entre las quemas controladas en la actividad agrícola, las cuales deben realizarse en «horas frías», cuando las temperaturas son bajas y la vegetación está húmeda, o cuando inicie la época de lluvias de manera que el riesgo de que el fuego se propague sea mínimo y no haya la pérdida de nutrientes del suelo.
Después de la quema controlada -agregó- es importante asegurarse de que todo rastro de fuego haya desaparecido por completo; además, toda quema controlada debe contar con el permiso correspondiente de la ABT.
También recomendó no botar colillas de cigarrillos o cerillos en las carreteras cercanas a bosques, ya que el viento puede arrastrarlos y activarlos, provocando incendios, tampoco botellas de plástico, vidrio o papeles que pueden ser combustibles y expandir las quemas, también evitar hacer fogatas en áreas con vegetación seca.
Los incendios forestales representan uno de los problemas ambientales con mayor impacto sobre los ecosistemas y, en más del 90% de los casos, son provocados por acciones humanas.
Además ocasionan la pérdida de la productividad, emisiones de gases de efecto invernadero, pérdida de la biodiversidad, pérdida o emigración de fauna, impacto negativo en el paisaje y daños a la salud del ser humano, entre otras consecuencias.
Los reportes diarios de focos de calor que emite la Dirección General de Gestión y Desarrollo Forestal del MMAyA están a disposición del público en la página web www.mmaya.gob.bo.